DOS AUTOPSIAS DE CHÉJOV
En Chekhov. A Life Donald Rayfield habla de dos autopsias que realizó Chéjov en 1884.
1.
El veinte de enero de 1884 fue a los baños. Cuando volvió a casa tomó un té y cenó, después se fue a la cama. A las ocho de la mañana del veintiuno de enero dijo que iría, como de costumbre, a la ciudad, pero alrededor de las nueve fue hallado muerto, colgado de una faja en la letrina de la casa de Osipov. El cadáver llevaba la vestimenta habitual del fallecido. Un extremo de la faja estaba enroscado alrededor de su cuello, el otro estaba atado a una viga de madera a dos metros y medio del suelo... Tenemos muy pocos datos para determinar el estado de ánimo de Efimov cuando cometió el crimen del suicidio: el olor a licor al abrir el cráneo, el pecho y las cavidades abdominales nos permiten suponer que en el momento de cometer el suicidio, Efim estaba, muy probablemente, intoxicado.
Ejercicio de las prácticas en la facultad de medicina.
2.
He estado conduciendo una troika rápida con un coronel decrépito que casi no respiraba y que era demasiado viejo para resultar útil, una criatura canosa y amable, que ha soñado con ser juez durante veinticinco años. El médico del distrito y yo hemos hecho la autopsia en campo abierto, bajo la copa de un roble joven, en un camino de carros... El difunto es “no local” y los campesinos que poseen la tierra donde se encontró el cuerpo nos suplicaron en el nombre de Dios y con lágrimas en los ojos que no hiciéramos la autopsia en su pueblo. “Las mujeres y los niños no podrán dormir de miedo”... El cadáver está cubierto con una sábana y lleva una camisa roja y pantalones nuevos. Hay una tolla y un icono encima. Le pedimos al jefe agua... Hay agua: una charca cercana. Pero nadie nos deja un cubo: la contaminaríamos... Los resultados de la autopsia son veinte fracturas en las costillas, edema en un pulmón, olor a alcohol en el estómago. Muerte violenta por estrangulamiento. El pecho del borracho fue aplastado por algo pesado, probablemente una buena rodilla campesina.
Carta a su editor Leikin.
1 comentario
Entrenomadas -
Saludos